Es un hecho real: hace aproximadamente 10.000 años todos los humanos en la faz de la tierra tenían los ojos cafés.

Ahora, la mitad de todos los norteamericanos tiene ojos cafés. A nivel mundial, este número podría ser aún mayor.

El color café proviene de la melanina, un pigmento de nuestros ojos que da también el color café al cabello, a la piel y a otras células.

La parte coloreada del ojo se conoce como iris.

El iris está compuesto de dos capas de células musculares y de otros tipos. En la mayoría, la parte posterior tiene al menos algo de pigmento café, aún si los ojos no se ven café. En las personas con ojos cafés, el pigmento de la parte frontal del iris también tiene algún pigmento café en sus células. Entre más melanina haya en el iris, más oscuro será el color café.

Otros colores de ojos

¿Cómo aparecieron los ojos azules y otros ojos claros en escena?

Los científicos rastrean el cambio histórico a un solo ancestro común. Esa persona tenía un cambio en un gen que controla la producción de melanina. Este cambio, o mutación se cree que fue lo que redujo la producción de melanina en el iris.

Algunos ojos se ven azules, verdes o color miel, no porque tengan pigmentos de distintos colores sino porque tienen menos melanina. Cuando hay menos melanina en el ojo, se absorbe menos luz. Esto significa que se dispersa una mayor cantidad de luz del iris. Cuando la luz se dispersa, se refleja de forma diferente a lo largo del espectro de color de la luz. Por lo tanto, los ojos que tienen menos melanina se verán azules. Si el iris tiene un poco más de melanina, se verán verdes o color miel.

Los ojos cafés no se heredan de un solo gen

Los científicos pensaban que un solo gen determinaba el color de los ojos. Investigación más reciente sugiere que hasta 16 genes distintos podrían ser responsables del color de los ojos. Esto ayuda a comprender por qué dos padres con igual color de ojos pueden tener hijos con ojos de colores totalmente distintos.

El color de los ojos de un bebé puede ir cambiando a un color café

Cuando los bebés nacen, sus ojos a veces se ven azules, mientras la melanina aún se sigue desarrollando. En el término de unos 12 meses, las células comienzan a producir melanina y a medida que se acumula ésta en el iris, el color de los ojos puede oscurecerse.

Los ojos cafés son más comunes en ciertos lugares

Los altos niveles de melanina en los ojos, el cabello y la piel, ayudan a proteger de los rayos solares nocivos. Esto explica por qué se ven con más frecuencia ojos cafés en los climas más cálidos de África y Asia que en Europa. En Islandia, los ojos café son la minoría. A medida que las personas se desplazan a lugares menos soleados, su necesidad de pigmento protector disminuye. El color de los ojos puede haber evolucionado a medida que nuestros primeros ancestros se desplazaron hacia lugares más fríos de la tierra.

La relación entre el color de los ojos y la salud ocular

Quienes tienen ojos cafés tienen menor incidencia de cáncer ocular, degeneración macular y retinopatía diabética. Los oftalmólogos no saben a ciencia cierta cuál es la razón, pero consideran que el pigmento de melanina puede ofrecer más protección a los ojos cafés. En la otra cara de la moneda, un estudio determinó que quienes tienen ojos cafés tienen dos veces mayor probabilidad de desarrollar cataratas que quienes tienen ojos claros. Los investigadores no buscaron la razón por la cual esto es cierto, pero sí descartaron otros factores que podrían hacer que las cataratas fueran más probables, como el cigarrillo y una lesión ocular.