Un nuevo estudio muestra que el ojo seco puede afectar sus ojos enrojeciéndolos e irritándolos. El ojo seco puede hacer que algunos tengan problemas para realizar sus actividades diarias mientras que otros experimentan dolor y sufren de depresión y ansiedad debilitantes. Éste es el primer estudio en detallar la forma como la vida se torna más difícil para 30 millones de personas en Estados Unidos que tienen la enfermedad de ojo seco.
El ojo seco suele ser fuente de frustración tanto para los médicos como para los pacientes. Es una enfermedad compleja que tiene muchas causas y con frecuencia problemas superpuestos e interacciones entre estos. Sus causas y sus efectos son distintos en cada paciente. Algunos no presentan signos de la enfermedad en las pruebas diagnósticas pero se sienten muy mal. Otros tienen resultados positivos para ojo seco pero se sienten muy bien.
Mientras que cada uno experimenta el ojo seco de forma diferente, hay algunos síntomas comunes:
- visión borrosa
- ardor;
- sensación de resecamiento en los ojos, o
- sensación arenosa o de cuerpo extraño en el ojo.
El ojo seco se debe a que no hay suficiente producción de lágrimas o a que la calidad de las lágrimas no puede mantener debidamente lubricada la superficie del ojo. Suele ocurrir cuando se tienen otras afecciones. Hay desencadenantes provenientes del medioambiente, como la contaminación o el clima, que tienen un papel importante. A veces, el ojo seco es producido por medicamentos como los antihistamínicos, los medicamentos para el asma o los anticonceptivos. La afcción puede empeorarse con el uso de la computadora y de los lentes de contacto.
Como resultado, es importante que los pacientes comuniquen con claridad lo que experimentan y que los oftalmólogos – los médicos especializados en tratamiento y cirugía ocular – tienen que tener una mejor comprensión del impacto que puede tener el ojo seco en las vidas de sus pacientes.
Con el fin de ayudar tanto a los pacientes como a los médicos, los investigadores que realizaron este estudio reciente encuestaron a 1.000 personas con ojo seco para evaluar la percepción de su salud ocular y de su estado de salud en general. Los resultados se compraron con las respuestas de quienes no tienen ojo seco.
Los pacientes con ojo seco calificaron su calidad de vida a un nivel significativamente menor en comparación con quienes no tienen esta enfermedad. Para ellos es más difícil realizar actividades sencillas de la vida diaria como utilizar la computadora y vestirse. Informan que el dolor que experimentan les dificulta tener relaciones positivas y satisfactorias con los demás. También informan experiencias de mayor ansiedad, depresión y un estado de salud general menos bueno que el de quienes no tienen ojo seco.
La investigación fue realizada por el laboratorio Shire, que produce el medicamento Xiidra para ojo seco. Fue presentada en octubre en la AAO 2018, la Reunión Anual 122 de la Academia Americana de Oftalmología. Los investigadores sostienen que esperan que este estudio ayude a mejorar la comunicación entre médicos y pacientes.
“Hay otros estudios buenos acerca de la calidad de vida de aquellos que viven con la enfermedad de ojo seco, aunque con frecuencia son historias anecdóticas compartidas por unos pocos doctores o pacientes”, señala una de las coautoras del estudio, la Dra. Jessica T. Markowitz, PhD. “Realmente queríamos calificar la experiencia de quienes tienen esta enfermedad”.
“Ya no se trata solo de que los pacientes se quejen de los síntomas”, añade el director de la investigación, Dr. Ipek Ozer Stillman, MBA, MS. “Hemos captado sus experiencias de manera científica y sistemática, hemos registrado cómo difieren las vidas de quienes tienen la enfermedad de ojo seco de las vidas de quienes no la padecen”.